lunes, 14 de mayo de 2012

Flores bajo la piel

Bacterias endófitas.

Plantas y bacterias están indisolublemente asociadas. Las bacterias pueden ser patogénicas, epifitas, endófitas, simbióticas y antagónicas. Gran cantidad de bacterias forman asociaciones íntimas con las plantas. Las bacterias asociadas a las plantas intercambian señales con su hospedero y poseen diversos mecanismos para adaptación y colonización.

Las bacterias endófitas colonizan tejidos internos vivos de las plantas, sin causar ningún efecto negativo inmediato o daño aparente a la planta. son encontradas principalmente en los espacios intercelulares de los tejidos y, con menor frecuencia, intracelularmente y en tejidos vasculares. Promueven el crecimiento en las plantas, aumentan la resistencia a enfermedades, contribuyen a la fijación biológica de nitrógeno  y brindan protección contra patógenos mediante la producción y síntesis de metabolitos secundarios. Se considera que la penetración y colonización de tejidos ocurren durante la formación de las semillas o posteriormente desde la rizosfera o el rizoplano. La penetración en la planta puede ocurrir por los estomas, heridas y áreas de emergencia de raíces laterales. Las endófitas pueden producir enzimas hidrolíticas capaces de degradar la pared celular de los vegetales. La densidad poblacional de bacterias endófitas es menor que la de patogénicas y, por lo menos algunas de ellas, no inducen respuesta de hipersensibilidad y por eso no son reconocidas por la planta. De modo general, la microbiota endófita es influenciada por los factores bióticos y abióticos que también afectan al suelo y la planta hospedera. Se considera que evolutivamente las bacterias endófitas son intermedias entre bacterias parasitas y patógenas de plantas. Las primeras evidencias de bacterias endófitas se encontraron en fósiles de las primeras plantas terrestres. 

 
Un ejemplo sobre asociación planta-bacteria estudiado ocurre en el Desierto Sonorense. Se trata de la asociación entre cardones (Pachycereus pringleii) creciendo sobre rocas con la ayuda de bacterias. La asociación planta-bacteria en cardones promueve el establecimiento de sus plantas y su crecimiento sobre rocas ígneas sin suelo. Las bacterias endófitas disuelven diversos tipos de rocas y minerales, liberando cantidades significativas de minerales útiles para la planta, ademas de fijar nitrógeno, y reducir las partículas de rocas hasta formar suelo. La formación de suelos es promovida por bacterias endófitas y del rizoplano, las cuales habitan el interior y superficie de las raíces de la planta.



La planta es un hábitat dinámico en que diversos factores pueden influenciar la estructura y composición de la comunidad bacteriana. El estudio del complejo ecosistema endófitico traerá múltiples beneficios a la agricultura y al entendimiento de las relaciones entre plantas y microorganismos. El impresionante universo de las plantas y sus huespedes internos esta ahí, esperando le echemos un vistazo y lo descubramos…



Adán Silva Flores...

Cartél de Flores



Adán Silva Flores...